Ponte en situación. Se hizo tarde en el trabajo, llegas a casa hasta arriba de cansancio y sin ganas de ponerte a cocinar. Al final, una lata de lo que sea, y una noche más que has comido fatal. Sigue la rueda de la mala alimentación, el estrés y el estar siempre al borde de la extenuación. Pero no hace falta que esto se repita un día tras otro. ¿Cómo? Aprendiendo los 5 mejores trucos para preparar una cena rápida. Coge papel y lápiz, que empezamos.
Los mejores trucos para preparar una cena rápida
Tal vez estás pensando que estos trucos para cocinar cenas rápidas solo te servirán en días de diario. Pero no, no es así. Lo cierto es que te ayudarán a desenvolverte mejor, aprender a preparar ricos platos en menos tiempo y, por qué no, ser la sensación cada vez que tengas visita o te apetezca sorprender a la familia. Los descubrimos.
Acelera la cocción
Un truco que no conoce mucha gente, pero que es verdaderamente útil. ¿Te falta el tiempo? Pues acelera la cocción. ¿Cómo? Muy sencillo, añadiendo al plato un poco de mantequilla, agua y sal. El líquido resultante genera vapor, lo que permite que el cocinado sea más veloz. Si encima pones una tapa sobre la olla o sartén, todavía lograrás una más elevada celeridad. ¿Lo sabías?
Ten siempre verdura fresca en la nevera
Este, más que un truco propiamente dicho, es una idea de previsión. Se trata de tener siempre tu nevera bien pertrechada de fruta y verdura fresca. ¿Por qué? Porque en lugar de llegar hasta arriba de cansancio y abrir una lata tras una larga jornada, podrás cortar un tomate, añadir algo de lechuga, pepino, aguacate o lo que te guste, aliñar y listo. Puedes tener una rica y sana ensalada en cuestión de minutos. Y, por supuesto, será mucho más saludable que cualquier comida enlatada.
Además, recuerda que tus ensaladas se pueden enriquecer de mil maneras. Con un aliño rico que sume mostaza antigua, por ejemplo, con frutos secos, con aceitunas y encurtidos, con maíz, con atún, con pollo a la plancha, con frutas… La lista es interminable, cómoda y adaptada perfectamente a tus gustos y necesidades.
¿Quieres carne? Cocina filetes finos
La carne nunca debe ser demonizada. Sabemos que un par de días por semana es imprescindible. Ahora bien, cocinada a la plancha es bastante más sana, aunque tarda más en estar lista, a no ser que te guste sangrante o muy poco hecha. Así pues, es momento de volver a tirar de la previsión. Si al comprarla en el súper, pides que te corten filetes muy finos, la tendrás lista en cuestión de pocos minutos. Luego, la acompañas de algo de ensalada, o un tomate y lechuga, y tienes una cena excelente que muchos nutricionistas recomiendan en sus mejores dietas equilibradas.
¿Conoces la cocina en microondas?
Todos usamos el microondas alguna vez durante el día. Para calentar un vaso de leche, un plato precocinado, los restos del día anterior… Pero, ¿sabes que este electrodoméstico es mucho más útil que eso? Sí, existen innumerables recetas de microondas para preparar en cuestión de segundos ricos platos sin necesidad de ensuciar prácticamente nada. Y no, no hace falta ser Falsarius, el célebre chef, para que el plato quede de nota.
Aprende a picar a toda velocidad
La forma más rápida para que verduras, carnes, pescados, etc., se cocinen bien, es cuando están muy picados. Así que, si aprendes a hacerlo a toda velocidad, o usas aparatos y robots de cocina para tal fin, los tiempos de cocción, plancha, frito o como quiera que vayas a hacer el plato, serán mucho más reducidos. ¡Puedes convertirte en todo un Karlos Argiñano!
Toma buena nota de estos 5 turcos para preparar una cena rápida. Seguro que te resultarán muy útiles en los momentos en que el agotamiento se apodere de ti. Recuerda que la mala alimentación hace que tu cuerpo y tu mente todavía funcionen peor, por lo que el estrés, el cansancio y la comida basura y rápida crean un círculo vicioso del que es difícil salir. Pero con estos simples consejos, al menos la parte de la alimentación la podrás mejorar enteros. Tu físico, tu cerebro y tu familia te lo van a agradecer muchísimo.