A menudo llamado «oro líquido», el aceite de argán es un producto orgánico extraído de los granos del árbol de argán, que es originario de Marruecos. Es extremadamente rico en nutrientes beneficiosos, incluidos ácidos grasos y vitamina E.

Sus propiedades lo hacen particularmente beneficioso para el cabello y la piel, lo que lo convierte en una opción cosmética popular para muchas celebridades.

Sin embargo, no es solo para los ricos y famosos, cualquiera puede cosechar los beneficios del aceite de argán para su cuerpo. Estos son algunos de sus usos más comunes.

Hidratante de la piel

 

El aceite de argán se usa más comúnmente como un humectante para la piel para hidratar y suavizarla. Con su alto contenido de vitamina E y ácidos grasos, el aceite de argán es el producto ideal para dar un impulso natural a la piel. Se absorbe fácilmente y no es grasoso ni irritante, lo que lo convierte en un excelente humectante natural.

Es fácil de usar en todo el cuerpo, incluida la cara y el cuello. Simplemente aplique unas gotas en la piel con suaves movimientos de frotamiento, como lo haría con cualquier loción para la cara y el cuerpo.

Acondicionador del cabello

 

Se ha demostrado que el aceite de argán hace que el cabello sea más suave, sedoso y brillante. Es el acondicionador ideal para el cabello e incluso puede ayudar a tratar las puntas abiertas y domar el cabello encrespado.

Usar aceite de argán para acondicionar tu cabello es extremadamente fácil. Viene en varios tipos de aplicaciones y productos y tiene tantas formas de usarlo como quieras.

Cabello natural y brillante

 

Debido a su capacidad para domar el frizz y dar brillo al cabello, el aceite de argán también se usa comúnmente como agente de peinado. Hace que el cabello sea más manejable y agrega un brillo saludable y atractivo a cualquier peinado.

Este es un paso ideal para agregar a su rutina diaria después del secado. Frota unas gotas de aceite de argán sobre tus palmas y luego peina tus dedos a través de tu cabello para aplicar.

Antienvejecimiento

 

El aceite de argán no solo actúa como un humectante eficaz, sino que también puede dar a la piel un brillo juvenil y reducir la visibilidad de las arrugas. Su efecto antioxidante hace que el aceite de argán sea el producto antienvejecimiento ideal.

Restaura la elasticidad y deja la piel con una sensación más tersa y suave.

 

La mejor manera de aplicar el aceite de argán para los efectos antienvejecimiento más prominentes es masajear unas gotas en la cara y el cuello antes de acostarse. Actúa como humectante y antienvejecimiento todo en uno.

 

Condiciones de piel seca

 

Las personas que sufren de piel seca o afecciones como el eccema que pueden dejar la piel en carne viva, escamosa y con picazón se beneficiarán enormemente del aceite de argán. La vitamina E y los ácidos grasos en el aceite de argán son excelentes para reparar la piel dañada y proporcionarle nutrientes que evitarán una mayor sequedad e irritación.

El aceite de argán también contiene ingredientes que alivian la piel. Aplicar una pequeña cantidad de aceite directamente sobre la piel afectada y masajear suavemente puede proporcionar alivio y estimular la curación.

 

Protección y curación

 

Los antioxidantes en el aceite de argán son generalmente beneficiosos para curar la piel que está irritada, agrietada, dañada o incluso quemada. Se usa mejor como preventivo para la piel seca o adolorida, pero también se puede usar para acelerar la curación. Sus propiedades incluyen reducir la inflamación, aliviar el dolor y aumentar la tasa de curación.

Aplicar unas gotas de aceite de argán en la piel adolorida o dañada ayuda a acelerar el proceso de curación.