Los centros de medicina estética reciben cada vez más solicitudes de tratamiento de rejuvenecimiento facial con prp. Este producto se obtiene de la propia sangre del paciente mediante el método de extracción y posterior centrifugado. Considerando que la porción de plasma que se va a usar es la que contiene la mayor concentración de plaquetas y que es superior a la sangre periférica.
Durante años, cada autor científico a partir del descubrimiento de esta propiedad autóloga de la sangre encargada de la regeneración celular, le ha ido dando nombres diferentes que hoy se conocen también como plasma enriquecido en plaquetas, concentrado rico en plaquetas, gel de plaquetas autólogo o plasma rico en factores de crecimiento.
Público adulto de todas las edades, atraído por la buena reputación de esta técnica de bioestimulación celular aplicada a la estética facial, acuden a las clínicas de medicina estética para conseguir un rostro más joven. Y es que el plasma rico en plaquetas está obteniendo tanto éxito popularmente sobre todo porque no requiere cirugía y es sencillo, rápido y razonablemente económico, sino, preguntar en Proposit.es.
La pérdida de colágeno en edades maduras es algo normal, pero también se está tratando a pieles más jóvenes con intención preventiva, por lo que se ha vuelto un tratamiento bastante extendido.
La bioestimulación con este producto autólogo, obtenido de la sangre del propio paciente por extracción indolora, persigue retrasar las señales que el paso del tiempo deja en la piel del rostro, cuello, escote y manos. También se aplica en pacientes con marcas de acné, manchas, cicatrices o estrías, así como en los injertos de piel en personas afectadas por las secuelas de quemaduras, consiguiendo aminorar claramente sus huellas y unificar el aspecto de la piel en la zona afectada.
En lo relativo a la estética, el prp y los factores de crecimiento contenidos en el producto, hacen que el envejecimiento se retrase y la piel ofrece un tono más luminoso, presenta más consistencia ya que elimina la flacidez, se recupera el brillo natural y el rostro ofrece un aspecto más joven y lozano.
Pero no es la única área de la medicina donde se aplica ni tampoco se limita a su uso en los humanos, también se tratan dolencias en animales, aunque no precisamente en estética sino sobre todo en traumatología . La cirugía maxilofacial, odontología, ortopedia, cirugía capilar, ortopedia o la ginoestética o cosmetoginecología están contando con este método de regenaración celular que interviene en varios procesos terapéuticos y permite acelerar los plazos de restablecimiento en tejidos, tendones, músculo, cartílagos, piel y hasta hueso.
Donde más se conoce de manera extendida es en medicina estética por la ausencia de intervención quirúrgica, pero ya es un tratamiento recurrente en traumatología, en la curación de lesiones como la tendinitis, epicondilitis y afecciones de rodilla como la artrosis. La proteína que contiene el prp denominada factores de crecimiento tiene la capacidad de regenerar cartílagos, ligamentos, tendones y músculos. Y su uso en medicina deportiva –traumatología sobre todo- está muy extendido precisamente por acortar los plazos de recuperación de los pacientes en periodos que eran doblemente largos con los tratamientos tradicionales.
La reparación tisular es la aplicación estrella, aunque no se ha parado de investigar acerca de todas sus posibles utilidades médicas. La comunidad científica tampoco se pone de acuerdo en considerar la cantidad de concentración standard a partir de la cual se considera plasma con mayor riqueza de plaquetas. Pero esto contrasta con los kits o métodos clínicos homologados y fabricados para obtener prp y que ya aplican en las clínicas donde se realiza.